Se ha publicado recientemente en la revista Clinical Nutrition, un artículo sobre nutrición clínica, en relación con la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) basado en las recomendaciones de la Sociedad Europea de Nutrición Clínica y Metabolismo (European Society for Clinical Nutrition and Metabolism, ESPEN).
A continuación, os mostramos un resumen de esta publicación. La autoría original de este artículo corresponde a Stephan C. Bischoff, Palle Bager, Johanna Escher, Alastair Forbes, Xavier Hébuterne, Christian Lodberg Hvas, Francisca Joly, Stansilaw Klek, Zeljko Krznaric, Johann Ockenga, Stéphane Schneider, Raanan Shamir, Kalina Stardelova, Darija Vranesic Bender, Nicolette Wierdsma y Arved Weimann.
Para comenzar
La EII, entre las que se incluyen principalmente la colitis ulcerosa (CU) y la enfermedad de Crohn (EC), son enfermedades frecuente en todos los países del mundo desarrollado. La desnutrición es una condición que puede darse tanto en la CU como en la EC, pero es mayor su prevalencia en el caso de la EC. Este hecho se debe a su capacidad de afectar a cualquier parte del tracto gastrointestinal, a diferencia de la CU, que se limita al colon y tiene pocos efectos malabsortivos de forma directa.
Contenido de esta guía
La guía que han realizado estos autores es una actualización y ampliación de la guía científica de ESPEN sobre nutrición clínica en la EII publicada por primera vez en 2017. La guía se ha reorganizado de acuerdo con las recomendaciones prácticas de ESPEN sobre nutrición clínica en la EII publicada en 2020.
Todas las recomendaciones han sido revisadas y, a criterio de los autores y en el caso de que fuera necesario, fueron revisadas en función de la nueva bibliografía, antes de someterse al procedimiento de consenso de la ESPEN. Además, se ha añadido un nuevo capítulo sobre la modulación de la microbiota como una nueva estrategia posible en el tratamiento de la EII. El número de recomendaciones ha aumentado a 71.
La guía está dirigida a los profesionales que trabajan en la práctica clínica que tratan a pacientes con EII, ya sea en hospitales o en centros ambulatorias. El contenido de estas directrices se basa tanto en aspectos generales de la atención a pacientes con EII, como en aspectos específicos durante la enfermedad activa y en remisión. En todas las recomendaciones se incluye el grado grados de evidencia, índices de consenso, comentarios breves y los enlaces más interesantes según la bibliografía citada.
Principales partes en las que se clasifican las recomendaciones
A continuación, les mostramos las secciones fundamentales que contiene este artículo y que recopila todas las recomendaciones dictadas por este grupo de expertos:
- Prevención de las EII.
- Aspectos generales de la nutrición en EII.
- Recomendaciones dietéticas en la enfermedad activa.
- Terapia nutricional médica en la EII activa.
- Aspectos quirúrgicos de la nutrición en la EII.
- Modulación de la microbiota (probióticos, prebióticos, antibióticos, dietas, fibra y trasplante de microbiota fetal).
- Recomendaciones dietéticas y de otro tipo específicas para la fase de remisión.
Algunas consideraciones para tener en cuenta
Los pacientes u otros miembros de la comunidad que puedan utilizar estas recomendaciones, deben consultar con un profesional sanitario y no deben confundir esta guía con un consejo médico profesional. Según los autores de esta publicación, esta guía no debe sustituir la búsqueda de asesoramiento médico y sanitario profesional de la salud.
Los autores también advierten que estas recomendaciones podrían no ser aplicables a todas las situaciones y debe ser interpretadas en relación a situaciones clínicas específicas y de los recursos disponibles. Por ello, corresponde a cada clínico adaptar estas recomendaciones a las normativas locales, a las circunstancias y a las necesidades individuales de cada paciente. La información que está recopilada en esta guía no debe considerarse completa, actualizada o exacta de forma total, ya que como indican los propios investigadores son directrices para su utilización posterior siendo adaptables. Tampoco hay que considerar que incluye todos los tratamientos o métodos de atención adecuados, ni como una norma de cuidados.
Conclusión
Estas recomendaciones se han elaborado de forma prudente y razonable, basándose en los conocimientos de los que disponían los autores en el momento de su elaboración. El objetivo ha sido ayudar a los profesionales sanitarios, para que tuvieran disponible una herramienta educativa con la que proporcionar información que pueda ayudarles a prestar la asistencia más adecuada a los pacientes que padecen estas enfermedades.
Enlace a la referencia
Para conocer más detalles sobre esta temática, puede consultar todas las publicaciones que realizaron los autores a texto completo en el siguiente enlace:
https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0261561422004289