Se ha publicado recientemente en la revista Nature Reviews Endocrinology, un articulo de revisión sobre nuevos aspectos del metabolismo de la vitamina D, proponiendo la piel como un nuevo modelo para estudiar funciones novedosas de esta vitamina.
La importancia de la vitamina D
La vitamina D tiene un papel clave en la estimulación de la absorción de calcio desde el intestino y en la salud esquelética, así como muchas otras funciones fisiológicas importantes. La vitamina D se produce en la piel. Posteriormente, se metaboliza a su forma hormonalmente activa, 1,25-dihidroxivitamina D (1,25 (OH) 2D), por la 1-hidroxilasa y catabolizada por la 24-hidroxilasa.
Objetivo de esta novedosa revisión
En esta revisión se pone especial atención al efecto de las mutaciones en las enzimas relacionadas con la vitamina D para ser activa desde el punto de vista hormonal y sus manifestaciones clínicas. También, se expone el papel de la proteína de unión a la vitamina D en el transporte de la vitamina D y sus metabolitos desde su fuente a sus objetivos, la hipótesis de la hormona libre en la entrada celular y el HSP70 (Heat Shock Proteins) para el transporte intracelular. Posteriormente, se comenta las funciones del receptor de vitamina D que media en las acciones de la célula. El reclutamiento específico de las células de los complejos que regulan los ligandos de los receptores de la vitamina D, provoca modificaciones en la expresión génica que tienen como resultado acciones fisiológicas diferentes que la 1,25 (OH) 2D y que están alteradas por las mutaciones en el receptor de la vitamina D.
La piel como modelo para el estudio de la vitamina D
La epidermis y el folículo piloso son ejemplos de tejidos no esqueléticos que expresan receptores de la vitamina D y que no solo producen vitamina D sino que también puede metabolizarla a su forma hormonalmente activa. Esto permite que la vitamina D regule la diferenciación de la epidermis y el ciclado del folículo piloso. Por este motivo, esta vitamina puede promover la función de barrera, cicatrización de heridas y crecimiento del cabello, a la vez que se ha observado que limita el desarrollo del cáncer.
A continuación, se enumeran las principales características que tiene la piel como modelo para el estudio de la vitamina D:
- La piel es la principal fuente de vitamina D, ya que contiene una gran cantidad de 7-deshidrocolesterol para la conversión a vitamina D tras la exposición a la radiación UVB.
- Todas las enzimas requeridas para el metabolismo de la vitamina D están presentes en los queratinocitos de la epidermis y en el folículo piloso. Se produce la regulación de al menos CYP27B1 (Cytochrome P450 Family 27 Subfamily B Member 1), pero muy probablemente también de CYP24A1 (Cytochrome P450 family 24 subfamily A member 1).
- Los queratinocitos expresan el receptor de vitamina D y responden a su ligando 1,25 (OH) 2D con cambios en la proliferación, diferenciación, formación de barreras y función inmune. Sin embargo, en diferentes etapas del proceso de diferenciación, se requieren reguladores del receptor de la vitamina D.
- El ciclo del folículo piloso es el mejor ejemplo que se conoce en la actual, de un proceso regulado por el receptor de la vitamina D que no requiere 1,25 (OH) 2D.
- La falta de receptor de la vitamina D en la epidermis y el folículo piloso predispone a una cicatrización deficiente de la herida y también tiene relación con algunos tipos de cáncer.
El futuro de la investigación de la vitamina D
En esta revisión, se analizan las funciones más importantes de la 1,25 (OH) 2D y del receptor de la vitamina D en la diferenciación epidérmica y el mecanismo por el cual el receptor de la vitamina D sin su ligando, puede controlar el ciclado del folículo piloso y los reguladores clave en la acción del receptor de la vitamina D en el folículo piloso y en la epidermis. Actualmente, la evidencia apunta que la vitamina D producida localmente en la piel, podría presentar un efecto mayor en estas funciones que la vitamina D ingerida a través de los alimentos.
Conclusión
En esta revisión, se expone una descripción de las nuevas ideas sobre la vitamina D metabolismo, transporte y mecanismos moleculares de acción, siendo la piel un modelo excelente, en particular, la epidermis y los folículos del cabello. Estos son órganos regenerativos en los que los queratinocitos, presentan todos los requisitos necesarios para producir y metabolizar la vitamina D y a sus metabolitos. Se puede concluir que la vitamina D en la piel ha demostrado resultados importantes en la supresión del cáncer y en la cicatrización de heridas.
Enlace a la referencia
Para acceder al artículo completo y obtener más información detallada, puede consultar el siguiente enlace:
https://www.nature.com/articles/s41574-019-0312-5