Recientemente se ha publicado en la revista Frontiers in Oncology, Molecular and Cellular Oncology, un artículo muy interesante sobre la intervención nutricional individualizada como componente terapéutico para prevenir en pacientes con cáncer de cuello uterino, los efectos adversos de la radioterapia.
A continuación, os mostramos un resumen de la investigación de estas autoras y algunas de las partes más interesantes. La autoría del artículo original corresponde a Ana Karen Medina-Jiménez y Rebeca Monroy-Torres.
Para comenzar
A nivel mundial, el cáncer cervicouterino ha sido la cuarta causa de muerte por cáncer entre las mujeres, mientras que en México fue la segunda causa. Los pacientes con cáncer que reciben quimioterapia y radioterapia presentan un riesgo incrementando de desnutrición secundaria a la enfermedad y al tratamiento y que presenta fundamentalmente, los efectos adversos en los síntomas gastrointestinales. Estas consecuencias negativas, afectan de forma directa a la terapia médica.
Debido a los beneficios de la intervención nutricional en el mantenimiento de la composición corporal en el cáncer durante la radioterapia y su asociación con la reducción de los efectos adversos, los autores han considerado de especial relevancia, la realización de este estudio.
El objetivo de esta investigación
El objetivo del presente estudio fue evaluar los beneficios de la terapia nutricional individualizada en la disminución de la pérdida de peso y los efectos adversos gastrointestinales y considerar estos resultados en la investigación farmacológica, especialmente en la reutilización de medicamentos.
Algunas cuestiones metodológicas importantes
Para llevar a cabo estos objetivos, se realizó un diseño longitudinal con dos grupos de comparación con un diagnóstico médico de cáncer de cuello uterino y que recibieron radioterapia de forma semanal:
1) el grupo de intervención (intervención y asesoramiento nutricional, Nutritional Intervention and Counseling, NIC) con 20 participantes;
2) el grupo de control (cohorte retrospectiva) con 9 participantes.
Se analizó la composición corporal semanal, la ingesta dietética, los efectos adversos (síntomas gastrointestinales), la glucosa, la hemoglobina y la presión arterial durante 4 a 5 semanas.
Principales resultados
En relación con los resultados de esta investigación, ambos grupos presentaron una pérdida de peso semanal (valor p = 0,013 y valor p = 0,043 respectivamente). El grupo de la cohorte retrospectiva frente al grupo de intervención (intervención y asesoramiento nutricional, NIC) presentó una pérdida de masa libre de grasa ≥ 500 g en un 67% y de 37% respectivamente. Al final de la intervención, un 25% del grupo NIC tenía <10 g/dl de hemoglobina frente al 60% del grupo control de la cohorte retrospectiva. En relación con la comparación de la ingesta dietética de vitaminas (A y ácido fólico), fibra (valor p = 0,006), hierro (valor p = 0,03) y energía (principalmente hidratos de carbono) (valor p = 0,04) estaban de acuerdo con las recomendaciones en el grupo NIC (valor p >0,05). El número necesario que tratar fue de 4, con un intervalo de confianza (IC al 95%) 2 a 13).
Se observó que la intervención nutricional y el asesoramiento semanal durante la radioterapia en el cáncer de cuello uterino permitía mantener o mejorar la masa muscular, la hemoglobina y la ingesta dietética por encima del 70% de las recomendaciones para el grupo NIC. Se mantuvo un estado nutricional adecuado y se redujo la tasa de complicaciones, principalmente de los síntomas gastrointestinales en el grupo NIC. La eficacia de la readaptación de fármacos puede mejorar mediante una terapia nutricional individualizada para prevenir los efectos adversos de la radioterapia en pacientes con cáncer de cuello uterino.
Para profundizar: recomendaciones y valor de este estudio
Según las autoras de esta investigación, es necesario desarrollar de forma urgente fármacos y estrategias más eficaces y económicas que tengan como objetivo la disminución de la resistencia que se ha generado a los fármacos actuales, debido a que algunos pacientes desarrollan resistencia a la quimioterapia o incrementan la sensibilidad a los fármacos existentes o a la reutilización de fármacos.
Algunas de las principales recomendaciones de estas autoras, es que la ingesta energética y nutricional se ha mantenido con la intervención con una adecuada adhesión a la misma y fue mejor y se mantuvo de forma constante semanalmente en los participantes que recibieron la intervención, aunque se mantuvo por debajo de lo recomendado. Por otra parte, la seguridad alimentaria podría ser un factor importante para satisfacer los requerimientos, por lo que la intervención nutricional individualizada debería considerar este aspecto, en el sentido de la disponibilidad de alimentos.
En relación con lo que aporta este estudio, es claro el efecto positivo de una intervención nutricional y un asesoramiento individualizado frente a un asesoramiento estándar en una cohorte retrospectiva sobre los efectos adversos y la composición corporal. El sobrepeso y la obesidad deben ser considerados como parte del tratamiento para la intervención nutricional y el asesoramiento controlado. Estos hallazgos refuerzan los beneficios de una intervención nutricional individualizada para ser implementada y propuesta en los estudios de reutilización de fármacos, logrando el mantenimiento del estado nutricional y una disminución de los efectos adversos, principalmente anorexia y náuseas, así como anemia.
Es esperable que estos hallazgos contribuyan a mejorar las metodologías de las diferentes investigaciones de la reutilización de los fármacos contra el cáncer y la mejora de la eficacia de estos.
Para aprender más de esta investigación
Si quieres conocer más sobre este estudio de la mano de la última autora, te invitamos a que participes en nuestro IX Seminario FINUT Alimentación, Nutrición y Salud que se celebrará el 22 de junio de 2022 de forma gratuita y virtual. Esta ponencia se titula, nutrición personalizada en el tratamiento del cáncer de cuello uterino. Puede consultar más información de todo el programa en el siguiente enlace: https://www.finut.org/webinars/alimentacion-nutricion-salud/
Conclusión
Una intervención y un asesoramiento nutricional individualizado a lo largo del tratamiento de radioterapia, demostró un efecto beneficioso en el mantenimiento de la masa muscular, el peso, la hemoglobina y una ingesta dietética superior al 70% de las recomendaciones. Así mismo, se observó una disminución de los efectos adversos gastrointestinales. Estos efectos beneficiosos, mejoran la eficacia de los tratamientos farmacológicos y, por consiguiente, mejoran la calidad de vida de los pacientes.
Enlace a la referencia
Para conocer más detalle sobre esta temática, puede consultar la publicación que realizaron los autores a texto completo en el siguiente enlace:
https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fonc.2020.595351/full