Se ha publicado en la revista The Lancet un artículo sobre el pronóstico de la esperanza de vida, los años de vida perdidos y la mortalidad por todas las causas (mortalidad global) y mortalidad por causas específicas, en concreto para 250 causas de muerte como predicciones para 2016-2040 en 195 países.
Trayectorias potenciales de salud
El conocimiento de las trayectorias potenciales de salud y los factores que predisponen a esa salud son cruciales para orientar la implementación de políticas de salud pública hacia unas mejoras de la salud de la población. Es necesaria una plataforma más robusta con el fin de evaluar diferentes políticas de salud y las trayectorias potenciales en salud.
Este artículo proporciona un enfoque para estudiar detalladamente las expectativas de vida, la mortalidad global y los pronósticos de mortalidad por causas específicas. Se estudiaron 250 causas de muertes organizadas en causas según el estudio de carga global de enfermedades, lesiones y factores de riesgo (Global Burden of Disease, Injuries, and Risk Factors Study, GBD) mediante la utilización de estimaciones de 1990-2016 para estimar predicciones para el futuro (2017-2040).
Para generar estas predicciones se utilizaron datos del estudio GBD 2016 teniendo en cuenta las relaciones entre los factores de riesgo y los resultados de salud. Se desarrollaron distintos modelos con componentes para evaluar la mortalidad por causas específicas, componentes debidos a los cambios en los factores de riesgo e intervenciones concretas; componentes relacionados con la tasa de mortalidad subyacente para cada causa en función del ingreso per cápita, los niveles educativos y la tasa de fecundidad. Se evaluaron los datos ajustando los modelos con datos de años anteriores (1990-2006). El modelo final utilizado para generar pronósticos se ajustó a los datos de 1990-2016. Estos modelos se aplicaron en 195 países para generar estimaciones de las predicciones para el año 2040.
Algunos datos a considerar
Se generaron previsiones para escenarios más desfavorables y para una mejor salud basándose en el cálculo de los percentiles 15 y 85, respectivamente. Se analizaron las tasas de cambios para todos los años y para todos los factores de riesgo del estudio de la carga global de enfermedades. Se aplicaron modelos para estudiar la mortalidad específica según edad y sexo, la esperanza de vida y los años de vida perdidos por 250 causas. Para cada pronóstico de referencia, se generaron estimaciones de mortalidad y años de vida perdidos atribuibles a cada factor de riesgo estudiado en el futuro, considerando peores y mejores situaciones en salud.
Principales resultados
A nivel mundial, la mayor parte de las variables independientes de salud se predice que mejorarán en 2040. Aunque los mejores escenarios en salud demuestran que podría ser posible un mayor progreso, es destacable que algunas variables como un IMC alto puede aumentar de forma muy importante sino se realizan intervenciones específicas.
Los modelos de predicciones pronostican que la esperanza de vida global aumente como media 4,4 años en el caso de los hombres y de las mujeres en 2040. En los peores escenarios de salud, las trayectorias pueden variar desde una ganancia de 7,8 años (5,9-9,8) hasta una pérdida no significativa de 0,4 años (-2,8 a 2,2 años) para los hombres y un aumento de 7,2 años (5,3-9,1) a prácticamente ningún cambio 0,1 años (-2,7-2,5 años) para las mujeres.
En 2040, se pronostica que Japón, Singapur, España y Suiza, vayan a presentar una esperanza de vida mayor a los 85 años para ambos sexos y que 59 países superarán la esperanza de vida de los 80 años. Se ha pronosticado para algunos países de la república centroafricana, Somalia y Zimbawe, una esperanza de vida menor de 65 años para el año 2040, lo cual indica que seguirán creciendo las diferencias respecto a las tasas de supervivencia de los países del mundo.
Años de vida perdidos y enfermedades crónicas no transmisibles
Los años de vida perdidos pronosticados se han mostrado como un aumento del número de enfermedades no transmisibles (ENT). El aumento de estas enfermedades estaría en gran medida, justificado por el envejecimiento global de la población. En comparación con 2016, se pronostica que las ENT representarán una mayor proporción de los años de vida perdidos en todas las regiones según los estudios de la carga global de las enfermedades hasta el año 2040, (media el 67,3 % de los años de vida perdidos a nivel mundial).
Es destacable que, en países de bajos ingresos, las enfermedades transmisibles, maternas, neonatales y nutricionales todavía representan una gran proporción de los años de vida perdidos para 2040 casi el 54% en el África subsahariana. Se encontraron grandes diferencias para numerosos riesgos en salud entre el pronóstico de referencia y un mejor escenario de salud para los años de vida perdidos atribuibles.
Principales factores de riesgo y escenarios en salud
En la mayor parte de los países, algunos factores de riesgo como altos niveles de presión arterial, glucemia, hábito tabáquico, altos niveles de IMC o la contaminación ambiental, proporcionaron las mayores diferencias en relación a los mejores escenarios de salud.
La principal excepción fue África subsahariana, en la cual se proyectaron muchos riesgos asociados a la pobreza y a los niveles más bajos de desarrollo. Los riesgos de estas regiones estuvieron asociados con problemas relacionados con el saneamiento del agua y del aire en los hogares o la desnutrición infantil.
Conclusiones
En este estudio, se proporciona un pronóstico amplio y con numerosas fortalezas mediante el cual se puede explorar diferentes escenarios en salud alternativos en relación a numerosas variables de salud independientes. En pronósticos de referencia, se apunta a mejoras generales para la mayoría de países hasta 2040, pero el rango encontrado en escenarios de salud genera una visión complicada en algunos aspectos del futuro, pero con la posibilidad de empeorar los resultados de salud si no se aplican las acciones políticas oportunas.
Para algunas causas de pérdida de años de vida, las diferencias importantes entre el pronóstico de referencia y los posibles escenarios alternativos reflejan la oportunidad de aumentar las ganancias si los países promueven trayectorias hacia mejores escenarios en salud o por el contrario desafíos muy alarmantes si los países no actúan.
Los responsables de la toma de decisiones deben planificar el cambio continuo hacia la prevención y el tratamiento de enfermedades crónicas no transmisibles y dirigir los recursos disponibles hacia los factores de riesgos modificables que puedan aumentar la mortalidad prematura. En las políticas de salud pública, deben ser prioritarios la atención a los riesgos modificables que generan mortalidad prematura para poder reducir la mortalidad atribuible a los factores de los estilos de vida. Las causas de estas enfermedades, así como los riesgos relacionados, deben seguir siendo la prioridad de salud, en especial, en los países con bajos ingresos.
Es necesario invertir parte del gasto sanitario en la asistencia para una mejor salud, en especial, para las personas con menores recursos económicos. Esta es sin duda, una de las líneas fundamentales para que todas las poblaciones puedan llevar una vida plena con las mejores posibilidades en salud, en especial, las personas que viven en países en condiciones más desfavorables.
Enlace a la referencia
Para conocer más en profundidad este tema, puede consultarse el artículo completo a través del siguiente enlace: https://www.thelancet.com/action/showPdf?pii=S0140-6736%2818%2931694-5
Esperanza de vida, los años de vida perdidos y la mortalidad por todas las causas (mortalidad global) y mortalidad por causas específicas
- enero 14, 2019
- 5:48 pm